El Opel Commodore fue lanzado en 1966 como una versión superior del más modesto Rekord. Tras cinco años, Opel lanzó una nueva generación de este vehículo, el Commodore B, que se basaba en el Rekord D. Si bien el Commodore A estaba disponible como berlina, sedán de dos puertas y coupé fastback, el nuevo modelo redujo a dos su oferta de carrocería permaneciendo sólo el sedán de cuatro puertas y el coupé de dos, perdiéndose el fastback.
En aquellos tiempos GM Europa comenzó a trabajar en la unificación de sus plataformas con el fin de abaratar los costes de producción de los modelos, de este modo la gama de productos que ofrecía Vauxhall -Reino Unido- y Opel -Europa continental- se fue uniformando poco a poco. No obstante, el Commodore fue un modelo exclusivo de Opel y los ejemplares que cruzaron el Canal de la Mancha llevaban en su calandra frontal la insignia del rayo.
Como era costumbre, la influencia de la casa madre GM en el diseño de sus coches europeos se agudizó especialmente en las década de los 60 y 70, de este modo el Commodore tenía un aspecto muy americano, con un aire a los coupés de Chevrolet y Buick. Un signo especialmente distintivo de los Commodore fue el empleo de techos de vinilos, que reforzaban aún más su reminiscencia del otro lado del Atlántico.
El Opel Commodore B tuvo presencia adaptado a mercados extranjeros, de este modo en Sudáfrica se vendió como kit CKD bajo el nombre de GM Ranger, modelo que también se produjo bajo esa denominación para los mercados belga y suizo en las plantas de la multinacional americana de Amberes y Biel-Bienne. Entre 1973 y 1976 fue construido en Irán y vendido en el país asiático como Chevrolet Iran y Chevrolet Royale 2500 y 2800.
A partir de 1974 el Commodore encaró sus últimos años de producción con una adaptación a las nueva normativa contra las emisiones de CO2, de este modo el motor 2.5 desapareció y las tres versiones del 2.8 vieron rebajada su potencia. Sin duda alguna, el modelo más atractivo de toda la gama Commodore B fue el coupé con el acabado GS/E y el motor 2.8 de 160 CV.
Del mismo modo que el Commodore A, el B fue también muy usado como vehículo de competición, sobre todo en carreras de turismos. Fue especialmente llamativa la versión denominada 'Jumbo' dedicada al campeonato Interserie 1974 con motor V8 de 6.0 litros y extravagante paquete aerodinámico.
1978 marca un año de profunda renovación para Opel. Desaparecen del catálogo los grandes sedanes Admiral y Diplomat, los cuales serían sustituidos por el nuevo Senator, basado en el Rekord E. La nueva generación del Commodore, el C, era un Rekord E con motor de seis cilindros y sólo se vendería como berlina de cuatro puertas. Por tanto, el sustituto del Commodore B Coupé sería el nuevo Monza, el atractivo fastback basado en el Senator.
Schuco presenta un modelo correcto en sus formas, muy bueno en detalles exteriores, con un interior sencillo de una sola pieza y con un par de aspectos mejorables. Destacan los elementos ornamentales de la carrocería, como el techo pintado en imitación del vinilo, los retrovisores, los limpiaparabrisas, los faros y la parrilla. El interior se ha resuelto con una sola pieza, siendo el volante y la caja de cambios las únicas partes independientes. Tiene buenos detalles como la colocación de calcas que imitan el cuadro de instrumentos o la madera del salpicadero. El aspecto más mejorable son las llantas, desproporcionadas en tamaño, algo muy comun en los modelos Schuco, sobre todo en los clásicos. Una miniatura bien hecha pero que si marcas como Minichamps o Auto Art se decidieran a hacerla, no compensaría comprar el Schuco.
1 comentario:
Hola!
me llamo guillermo, tengo un opel commodore b GS 2.8 de 1974, es un 6 cilindros en linia con doble carburador de doble cuerpo! una maravilla el sonido! pocos coches de hoy día suenan con esa finura, espectacular!
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