sábado, noviembre 07, 2020

Avia 2500 'Repsol' de Salvat








Avia era la marca comercial empleada por la empresa Aeronáutica Industrial SA -Aisa- en sus vehículos. Esta compañía, un pequeño constructor aeronáutico con sede en Cuatrovientos, Carabanchel -Madrid-, tiene sus orígenes en la mercantil Talleres J Loring, fundada en 1923 por Jorge Loring Martínez, uno de los pioneros de la aviación en España. Desde 1934 la empresa pasaría a denominarse Aisa, la cual se dedicaba a la construcción de aviones alemanes Fokker para el Ejército de la entonces República Española, además de algunas versiones del Autogiro de La Cierva Company. Durante la Guerra Civil, Aisa fue trasladada a Alicante, y al término de esta regresó a su ubicación original, dedicándose entonces a la construcción de avionetas con motor Enmasa.

No fueron buenos años los de la Posguerra en España para la construcción aeronáutica, y Aisa apenas se contentaba con trabajos de reparación y mantenimiento de las aeronaves existentes. La demanda de vehículos industriales y de trabajo abrió un nuevo camino para Aisa, el mismo emprendido por otras empresas aeronáuticas de su época, diversificar la actividad, naciendo de este modo en 1957 el primer vehículo industrial bajo la marca Avia, el Motocarro 200, con capacidad de carga de hasta 500 Kg, y motor Hispano-Villiers, el mismo que montaba el microcoche Biscúter. 

El motocarro Avia 200 permitió a Aisa desarrollar su red comercial y de asistencia, lo que allanó el camino a la empresa para optar a objetivos más ambiciosos, y de este modo, en la Feria de Muestras de Barcelona de 1960 se presentó el modelo más ambicioso y popular de la firma, el Avia 2500. 

Entró en producción un año más tarde con una importantísima novedad, su diseño de cabina avanzada, en lugar del original que nunca llegó a ver a luz. Iba equipado con un motor diésel de cuatro cilindros Perkins P4 de 3.1 litros y 68 CV de potencia. Un año más tarde se añadirían los modelos 1500 y 3500 con mayor capacidad de carga, incluida una versión autobús de 15 plazas. Estos modelos fueron certificados por el propio Instituto Nacional de Industria, propietario del 33 por ciento de las acciones de Aisa. 

La gran ventaja del camión ligero Avia fue su versatilidad, dado que su chasis admitía numerosas variantes de carrocería según el uso que se le quisiera dar. En 1963 se añaden a la gama los modelos Avia 4000, 5000, 6500 y 7000, con una cabina un poco más ancha y motores de mayor cilindrada, lo que provocó la entrada de Aisa en el segmento de los camiones medios, entrando en competencia directa con los Ebro de Motor Ibérica, además del segmento de los autobuses. La gama de furgonetas y camiones ligeros Avia tuvo un gran éxito, llegándose a vender en Portugal bajo la firma Sodag y fabricándose en Setubal, siendo una de las primeras firmas españolas en exportar su tecnología.

A mediados de los 60, el mercado del vehículo industrial en su segmento medio y ligero comienza a cambiar en España. De una amalgama de fabricantes muy diversa, las diferentes empresas comienzan a integrarse unas en otras, Enasa se hace con SAVA, Fadisa pasa a formar parte de Motor Ibérica, Barreiros adquiere los industriales ligeros Tempo e Imosa, fabricante de las furgonetas DKW en España, absorbe la filial de Borgward. Cuando la canadiense Massey Fergusson adquiere Perkins Hispania, principal suministrador de motores de Aisa, y la mayoría del accionariado de Motor Ibérica, Aisa quedó en una situación muy complicada pues ahora debía adquirir sus motores a una empresa de su competencia directa, además, todo se vio agraviada por una situación financiera complicada, por lo que Aisa finalmente pasó a integrarse en Motor Ibérica. 

Las furgonetas Ebro F260/275/350 también se vendieron bajo la marca Avia bajo las denominaciones 1000, 1250 y 2000. Motor Ibérica siguió vendiendo el Avia 2500 y sus derivados gracia a su gran aceptación, y es que transportistas autónomos y empresas no sólo se fijaban en el camión de Aisa por su calidad y su practicidad, también por su estética. Y es que pese a que el criterio estético no suele ser determinante a la hora de adquirir un vehículo industrial, el agradable diseño redondeado de Avia con su gran calandra central era muy bonito y llamativo.

Desde el año 1969, la empresa petroquímica Repsol viene patrocinando activamente en España los deportes del motor con la creación de un equipo propio inclusive. El vehículo elegido por esta formación para el desplazamiento del material, repuestos y utillaje fue la versión furgón del Avia 2500, decorado con los entonces colores corporativos de la empresa. Importante, los vehículos Avia de Aisa nada tenían que ver con los fabricados en la entonces república socialista de Checoslovaquia por una empresa también denominada Avia y, curiosidades de la vida, también aeronáutica.

Ruidosos y arrojando grandes humaredas de color negro, pero con su entrañable apariencia, los camiones y furgonetas Avia eran una visión habitual por las calles de las ciudades españolas para aquellos que nos acercamos a los 40 años. De manos de la editorial Salvat y su coleccionable 'Vehículos de Servicio y Reparto' ya es posible disponer fácilmente de una réplica de un Avia 2500, que hasta ahora sólo ofrecía el fabricante artesanal asturiano Modeltrans, cuya actividad ya cesó. Realizado por Ixo Models en zamac, la Avia 2500 de la editorial Salvat representa un modelo con carrocería furgón, de la primera serie y con la decoración del equipo Repsol de competición. La miniatura es correcta en formas y proporciones y destaca por un excelente acabado pese a ser un modelo económico que se vende en un coleccionable de las tiendas y kioscos de prensa. No es que tampoco sea fácil adquirir un ejemplar, pues lo cierto es que los comercios donde se venden apenas ofrecen las unidades que traen para los suscriptores, pero algunas superficies suelen disponer de ejemplares extras, aunque hay que buscarlas bien. Sea como sea, es un modelo muy interesante para el coleccionista español, que también se presta para que los más manitas puedan realizar modificaciones sobre el mismo.

2 comentarios:

A.Sivianes dijo...

Yo estoy "flipando" con esta colección, Keko. Al final me está gustando casi más que la de Pegaso. Hoy mismo recibí el Commer de TVE y el Mini de los helados, vaya monerías! El Commer es una pasada, es que ni de lejos diría que es de coleccionable. Lleva muchos insertos finos y el molde y la pintura son de calidad. Enhorabuena a los de Salvat, y encima son modelos de 15 euros! Se han doctorado con esta colección y la de Pegaso desde luego.

Lo mismo aplica para tu estupenda Avia, que también tengo (ya hice yo bien en suscribirme, aunque no puedo sacar los modelos de sus blisters...). Tremendamente vistosa con sus colores y muy "cañí"! Me encanta! Luce muy bien, y quien no se acuerda (los que ya tenemos cierta edad) de estos vehículos...


Abrazos!


Keko dijo...

Detrás de ambas colecciones de Salvat hay gente que se ha preocupado mucho de que se hicieran buenas miniaturas. Yo lo he dicho muchas veces, estas miniaturas tienen nivel de calidad similar a los camiones que hace 10 años hacían Norev o Minichamps. Y a precios muy competitivos. Yo no soy coleccionista de camiones, sólo cojo algunos, los que me llaman mucho la atención y lo cierto es que con estas miniaturas me doy por más que satisfecho, vamos que teniendo estos no me tienta comprar un Otero u Modeltrans. Con los coches, sí que soy más exigente y a la vista está.

Saludos