Carroll Shelby, el granjero y piloto norteamericano, descubrió el maná cuando instaló en el pequeño y estiloso Ace de la británica AC el motor Ford V8 de bloque pequeño, naciendo así el AC Shelby Cobra, uno de los grandes mitos del automovilismo. Con el fin de aprovechar el tirón del Cobra, la gente de AC quiso dar un paso adelante y elevar el listón de sus productos hacia una dimension superior, para pasar de ser un competidor de marcas como Triumph, MG o Alfa Romeo a plantar cara grandes como Ferrari, Jaguar y Aston Martin.
El punto de partida de AC fue el chasis del Cobra 427 MK III, al que alargaron unas seis pulgadas. Para la carrocería se recurrió al italiano Pietro Frua, el cual empleó un diseño muy similar al de los contemporáneos Maserati Mistral y Glas V8. En el vano motor se empleó el todopoderoso y ultrafiable motor Ford V8 'small block' del Cobra 427, con 7.000 cc y 350 cv de potencia. El interior era muy lujoso, con piel de gran calidad, maderas nobles, moquetas mullidas y un curioso selector del cambio automático.
De este modo nació el AC 428 Frua, disponible tanto en carrocería coupé como descapotable, un automóvil a priori y sobre el papel excepcional, bien construido, con una impresionante estética y un motor fuera de serie... Pero que ni mucho menos cumplió las expectativas generadas, puesto que ni AC era una marca que los potenciales compradores indentificasen con la filosofía con que vendían el coche ni su precio era realista, ya que costaba dos veces un Jaguar E-Type. Y es que tener que enviar los chasis a Italia para su ensamblaje y vuelta a Inglaterra para su distribución encarecía notablemente el producto. Si a todo esto le añadimos la propia competencia que la misma casa se hacia con el AC Cobra y que la propia Ford se iba cada vez desligando más de la colaboración con AC para centrarse en la distribución en Europa del Mustang, finalmente y después de ocho años en producción y apenas 81 unidades construidas, el 428 Frua pasó a mejor vida. Ni siquiera su aparición en la archifamosa serie de TV 'Los Vengadores', con la bella Linda Thorson al volante, ayudó con las ventas. Condenado al ostracismo, hoy día se ha revelado como un clásico muy demandado por los coleccionistas.
Posiblemente estemos, bajo mi opinión, ante uno de las mejores miniaturas de que hasta ahora ha hecho Neo Scale Models. La combinación me parece perfecta: las formas del molde y el acabado son de sobresaliente. Existe la posibilidad de elegirlo en dos colores metalizados, rojo y azul. La única pega que le pongo... ¡Que venga ya el cabriolet!
2 comentarios:
¡Hombre! Tengo pendiente esa temporada de Los Vengadores. Me fijaré, insistentemente, en este coche.
Un saludo.
Hola!! Concretamente este coche sale en el primer capítulo donde debutó Linda Thornson, el que se va Diana Rigg
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