Los primeros deportivos Pegaso Z102 proyectados por Wifredo Ricart salieron de la fábrica de La Sagrera con una carrocería de fabricación propia y recibieron la denominación 'Berlinetta Enasa' o 'Berlinetta Barcelona'. Si bien este diseño de los ingenieros Biolino y Masgrau, asesorados por el estilista Castagnero, resultaba muy atractivo, Ricart apenas tardó dos años en buscar los servicios de otros maestros carroceros especialistas de fama internacional, pues el objetivo del deportivo Z102 no era otro que posicionarse en el mercado exterior para lograr traer divisas a España. Así pues, del mismo modo que los grandes maestros de la pintura y la escultura del Renacimiento representaron en sus obras al legendario caballo alado mitológico, los nombres más destacados de la industria de la carrocería se encargarían de dejar su impronta sobre el chasis del deportivo Pegaso Z102, un automóvil tan enigmático como el ser fantástico que le daba nombre.
Impresionado por el magnífico diseño del deportivo Talbot-Lago T26, Ricart contacta con Jacques Saoutchik, propietario de la empresa homónima, artífice del diseño del auto en cuestión. Saoutchik, emigrante ucraniano cuyo verdadero nombre era Jakov Savchouk, fundó a principios del siglo XX un taller de ebanistería en los alrededores de París y ya en los años de entreguerra se había hecho un nombre en el negocio de la carrocería del automóvil trabajando con marcas de tanto prestigio como Cadillac, Mercedes o Rolls Royce. No obstante hay dos trabajos del artesano ruso-francés que copan puestos de honor en el diseño automotriz: La excéntrica berlina Bucciali TAV3 8-23 'Fleche D´Or' y el futurista coupé Hispano Suiza H6C 'Xenia Dubonnet', un automóvil único construido para el magnate francés de la alimentación André Dubonnet.
La compañía de Neuilly-sur-Seine vivía una realidad muy diferente a la de hace 20 años motivada sobre todo por la dura política fiscal que Francia impuso a los fabricantes de automóviles de lujo tras la II Guerra Mundial. Saoutchik también había contactado con Ricart cuando oyó hablar del proyecto Pegaso Z102 y vio en este proyecto la oportunidad de poder mejorar las precarias condiciones de su empresa y sus finanzas.
Saoutchik construyó 18 carrocerías sobre bastidores Pegaso. El contrato firmado entre ambas marcas estipuló que el carrocero francés sería también distribuidor de Pegaso en el país galo. De las 18 unidades, cuatro eran descapotables y el resto tipo 'Coach', expresión francesa que definía en principio a un carruaje de cuatro ruedas cerrado y que aplicado al automóvil viene a referirse a un coupé de tres volúmenes, o sea, similar a la berlinetta italiana pero con el maletero bien diferenciado. Los rasgos definitorios del estilo de Saoutchik en los Pegaso Z102 eran las líneas curvas y fluidas, con formas muy recargadas que solían terminar en aletas. Un recurso muy propio de los Pegasos "franceses" eran sus faros delanteros con visera, muy al estilo de los autos americanos. En los últimos años de vida de su empresa, Saoutchik tuvo como empleado a un joven, brillante y prometedor diseñador francés llamado Paul Braq, que a posteriori llegaría a ser el diseñador de cabecera de Mercedes durante las décadas de los 60 y 70.
El modelo del que es objeto esta entrada es el número de chasis 01021500148 y con matrícula original M-138223, Coach Saoutchik Serie 2 de color blanco con el techo gris y cuyo propietario fue el coronel de la Intendencia del Aire Julián Sánchez Arangüena. Según la información que consta en www.pieldetoro.net, este automóvil fue expuesto por primera vez en el Salón de París de 1954 y en 1961, tras varios cambios de dueño, es adquirido por un ciudadano estadounidense afincado en España, Garland W Burke, que se lo lleva a los Estados Unidos. En 1994 participó en el Concurso de Elegancia de Pebble Beach. En el año 2000 lo adquiere el coleccionista alemán Helmut Pende que lo restaura y lo pinta de rojo con el techo negro y a posteriori recuperaría su color original. En agosto de 2003 se subasta en Christies. Esta unidad iba equipada con la versión de 2,8 litros del motor Pegaso V8.
Hoy toca presentar la que para mi ha sido la mejor miniatura que he adquirido este año, tanto por el impresionante nivel de realización que tiene como por el modelo al que representa. Se trata del Pegaso Z102 Coach Saoutchik Serie 2 realizado por la firma holandesa Matrix Scale Models. La calificación que como coleccionista doy a esta miniatura es muy sencilla: sobresaliente. El model reproduce muy bien las sensuales y barrocas formas del coche original y tiene un nivel de terminación y detallado al más alto nivel, con gran cantidad de piezas independientes realizadas en metal fotograbado que dan un gran realismo al modelo. El interior también se ha reproducido con gran esmero y refinamiento. Dos son los detalles que me gustaría destacar de este modelo, lo bien que han sido realizados los clásicos neumáticos de balón y la precisión de sus logotipos, donde se puede ver perfectamente el minúsculo caballo de Enasa. Se trata de una miniatura que no podía faltar en mi colección como coleccionista español que soy pues representa a uno de los grandes y pocos tesoros de la automoción española. Es de elogiar que Matrix se haya subido al carro de los fabricantes de miniaturas que muy poquito a poquito están incluyendo algún modelo de Pegaso en sus catálogos y por mi parte sólo espero que la tónica siga.
3 comentarios:
Otra de las maravillas de la Enasa estas pequeñas joyas son toda una deicia
Saludos
Bufff... qué pasada!!
Es lo máximo que se me ocurre.
Saludos!
Sí, es una pasada de miniatura, para mi , la mejor de este año.
Saludos
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