El primer camión de gran tonelaje que desarrolló Mercedes-Benz tras la II Guerra Mundial fue el L6600, cuya producción se inició en 1950. Mecánicamente montaba un motor diésel de precámara de 8.3 litros de cilindrada y 145 CV de potencia, un propulsor cuya construcción era tan sólida y precisa que se decía podía rodar 200.000 kilómetros sin ninguna avería.
Igualmente al estar sujeto por soportes de goma la vibración que producía era mínima. Destacaba también su sistema de refrigeración controlado. El "seis-seis", como era conocido popularmente, heredaba el chasis y la cabina de su antecesor, el 6500, pero el capó y los parachoques eran de nuevo cuño y más aerodinámicos, aunque con todo, las líneas del 6600 eran muy similares a las de otros camiones de gran tonelaje de su tiempo.
Desde el principio, el Mercedes se reveló como el vehículo predilecto de los transportistas alemanes en el segmento de las 13-15 toneladas, imponiéndose a otros fabricantes como Krupp, MAN, Henschel, Büssing o Magirus. Incluso, se mostró efectivo como una alternativa a la clase 16 toneladas, ya que en muchas ocasiones las empresas de transporte preferían ahorrar los 15.000 Marcos de diferencia que había entre un 16 toneladas de 180-200 CV y un 13-15 de 145 CV.
La marca de miniaturas alemana Schuco cuenta en su catálogo con diversas variantes del L6600 de Mercedes, tanto de carrocería como de decoraciones, en este caso he optado por un modelo de caja cerrada acompañado de remolque dos ejes, perteneciente a la flota de distribución de la popular marca alemana de refrescos 'Sinalco'. El acabado de la miniatura se puede decir que es perfecto y su nivel de detalle lo hace una pieza muy realista. El decorado de la caja y del remolque es ejemplar. Son detalles excelentes la rejilla del radiador, los neumáticos 'Continental' con todos sus anagramas de medidas, los limpiaparabrisas en fotograbado o incluso que se pueda ver el motor a través de las rejillas laterales del capó, aunque es una pena que no sea operable. El interior está muy bien aunque no está tan trabajado como el exterior, no obstante, es una pieza que merece estar en cualquier colección de camiones clásicos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario