martes, junio 30, 2009

Bizzarrini 5300 GT Spyder de Spark






Una vez más aparece en 'El Kekomóvil' el nombre Bizzarrini unido a otro automóvil de excepción. En un capítulo anterior nos referimos al raro y futurista coupé construido para el Duque de Aosta, modelo único en el mundo, y ahora lo hacemos al Spyder 5300 GT, del que se hicieron tres unidades sólamente, dos de las cuales están en manos de un coleccionista americano y la restante perteneció a la prestigiosa Blackhawk Collection. 

Los tres Bizzarrini Spyder fueron construidos por la empresa Stile Italia y no en los talleres de Livorno de la propia marca. Todos se basaban en el coupé 5300 GT y al igual que éste montaban el motor V8 de 5.3 litros (o 327 Pulgadas Cúbicas) del Chevrolet Corvette que les confería 350 CV de potencia. De los tres Spyders, uno fue un prototipo y los otros dos se fabricaron en serie.

El primer modelo data de 1966 y es de color gris metalizado. La barra antivuelco así como el pequeño techo desmontable se retiraban completamente, hecho que confería una mayor gracia a su carrocería, más pureza de líneas y menos aditamentos. 

El segundo coche se fabricó en 1967 y estaba pintado en color azul. Durante muchos años perteneció a la Blackhawk Collection. Tanto éste como el prototipo, el gris, llevaban las llantas típicas de aleación de Bizzarrini. 

El tercer y último modelo vio la luz en 1968, un año antes del cierre de la fábrica de Livorno, era de color rojo y llevaba llantas de radios tipo Borrani. Tanto éste último como el prototipo gris pertenecen a un coleccionista americano. El azul fue subastado en 1998 por 180.000 dólares.

Tras el precioso Duca D´Aosta Spark nos presenta una no menos fantástica reproducción del tercer Bizzarrini Spyder 5300 GT, una reproducción realizada de forma excelente, tal y como se pueden ver las fotos donde especialmente destaca su exterior, con un molde muy proporcionado y acertado de formas en el que destacan todos los ornamentos hechos en fotograbado. El interior aunque algo más simple cuenta con el cuadro de instrumentos detallado y realizado en imitación madera, al igual que el volante. Una vez más Spark demuestra su buen hacer con los coches más raros y exóticos que se conocen. Quizás el único fallo que hay está en la peana, que fecha el coche en 1966 cuando en realidad se fabricó dos años más tarde, aunque es un factor insignificante que no afecta para nada a la miniatura.

No hay comentarios: