Una vez terminada la II Guerra Mundial, General Motors retomó el control sobre su filial europea Opel después de que en los años del III Reich el Partido Nazi entonces en el poder se la expropiara. Y fue en esos años cuando la influencia de Detroit se acentuó especialmente en los productos de la firma del rayo, siendo el Kapitän de 1953 uno de los mejores ejemplos de ello.
La nueva generación Kapitän, lanzada en noviembre de 1953, presentaba un aspecto completamente renovado respecto a sus antecesores: era más largo y ancho y tenía un estilo muy similar a los Chevrolet coetáneos: Carrocería bicolor, aletines traseros o una gran parrilla frontal con dientes y ornamentos cromados le daban ese inconfundible aire del otro lado del Atlántico.
Técnicamente resultó un automóvil muy avanzado, de gran calidad de construcción, robusto y fiable. Bajó el capó montaba un motor de seis cilindros en línea de 2,5 litros con 67 CV de potencia en sus versiones iniciales, llegando hasta los 75 en las últimas antes de su reemplazo por el modelo de 1958. El motor iba aparejado a una caja de cambios manual de tres velocidades situada en la columna de la dirección y gracias a su par motor la respuesta era muy buena y ello obligaba no tener que usarla en demasía. En 1957 se incluyó una nueva transmisión de tres velocidades y overdrive.
Con unas prestaciones de 140 Km/H de velocidad máxima, suponía una excelente alternativa a los Mercedes Pontón de la Clase E. En su vida comercial el Kapitän 53-58 superó las 154.000 unidades producidas, siendo el coche más vendido en Alemania tras el Volkswagen Beetle y su propio hermano mejor, el Rekord.
Por su parte, Dethleffs es un reputado fabricante de caravanas alemán de la ciudad de Isny im Allgäu. Concretamente su fundador, Arist Dethleffs, construyó el primer vehículo vivienda del país teutón en 1931. En un tiempo donde el término "vacaciones en familia" era considerado un lujo reservado a unos pocos, el señor Dethleffs se mostró como un pionero en la democratización del turismo.
El modelo que nos ocupa es su caravana modelo Globetrotter -trotamundos- fabricado entre 1950 y 1959. Cuenta con un diseño patentado de tres habitaciones. Con un vehículo similar, Úrsula Detheffs realizó su famoso viaje a Egipto.
Sin duda alguna, no se me ocurre un conjunto de vehículos más sugerentes para hacer turismo con estilo en los años 50 por Europa que una espaciosa y cómoda Dethleffs Globetrotter tirada por un espléndido y potente Opel Kapitän.
Hablar de Schuco es hacerlo de un nombre legendario y con mayúsculas en el mundo del coleccionismo de autos a escala. La firma con sede en Nuremberg lleva años ofreciendo impresionantes réplicas y si se trata de vehículos alemanes, ya sean coches, autobuses, furgonetas o camiones, son punta de lanza y referencia entre los aficionados. Schuco incluye en su catálogo una serie de conjuntos de vehículo con remolque a cada cual más bonito y entrañable. Ya en 'El Kekomóvil' he mostrado varios de ellos y hoy nos llega una novedad especialmente llamativa, el Opel Kapitän tirando de la caravana Dethleffs Globetrotter. Un conjunto ejecutado con una excelente calidad, moldes correctos y proporcionados, la cantidad de pintura adecuada y un acabado de lo más cuidado con piezas independientes de metal fotograbado. El coche está realizado en diecast mientras que el remolque es de resina. No dejen pasar la oportunidad de hacerse con uno de estos precioso conjuntos de Schuco, pues sin duda, serán el centro de atención de sus vitrinas.
2 comentarios:
hermosas ambas piezas, muy bien definidas, con buenos detalles.
saludos!
Gracias Mariano, sí están muy bien, la verdad es que Schuco es toda una garantía
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