martes, julio 05, 2016

Buick Roadmaster Convertible 1957 de American Excellence







La gama Buick para 1957 ganó un estilo aún más agresivo que su antecesor gracias a su nueva carrocería de diseño más bajo y musculoso y a un parabrisas panorámico de novedoso estilo con los montantes mucho más inclinados hacia atrás. La clásica línea ornamental 'sweepspear', biselada en rojo, recorría todo el lateral del coche describiendo una curva justo delante de la aleta trasera. La zaga del coche ganó unas alas cromadas mucho más acentuadas que en la anterior generación fruto de la moda que poco a poco iba imponiéndose. En la parte delantera seguían presentes las defensas tipo Dagmar. Las salidas de los tubos de escape se situaron camufladas en la gran pieza cromada que conformaba la defensa trasera.

El modelo Roadmaster seguía estando en el pináculo del tope de la gama Buick. Estaba disponible como sedán cuatro puertas y coupé Riviera, así como Convertible. La leyenda 'Roadmaster' podía leerse en el doblez de la tapa del maletero en letras cromadas. Era fácilmente reconocible gracias a las cuatro ventanillas de aireación que tradicionalmente Buick venía colocando sobre las aletas delantera.

Buick introdujo un nuevo y más potente motor para el Roadmaster de 1957, el V8 Nailhead 364 ci de  6.000 cc y 300 cv de potencia, siempre aparejado a una caja de cambios automática Dynaflow de dos velocidades. Con un precio de venta de 4.065 dólares de la época, sólo se fabricaron 4.364 unidades del Roadmaster Convertible. En 1958 Buick presenta su nueva gama, con un diseño aún más barroco y recargado y el nuevo frontal de dobles ópticas, tan de moda entonces en los Estados Unidos, aunque esa es ya otra historia.

De la mano del fabricante Neo Scale Models y vendido bajo su marca American Excellence, presento hoy una de esas miniaturas de las que no hay que contar mucho pues sólo basta echar un vistazo a las fotos para darnos cuenta de que llama por sí sólo la atención. El modelo cuenta con un molde correcto y proporcionado, aunque como viene siendo habitual en las miniaturas de Neo, lo mejor de todo es su impresionante acabado, fantástica aplicación de la pintura y la multitud de detalles reproducidos bien en piezas independientes de plástico o de metal fotograbado. Su acabado es básicamente similar al de otro modelo que presenté en el blog hace unos años, el Century Caballero Estate Wagon, que no es más que su equivalente en carrocería familiar.

1 comentario:

A.Sivianes dijo...

Qué bien trabajan los de NEO (son los que tienen el sello "American Excellence, no?)!

Otra pasada de modelo, con esos colores me recuerda mucho al Batmovile de los años 60.
Debe ser increíble estar un rato contemplando esos detalles...

Como siempre, enhorabuena por sumar otro increíble modelo más a tu colección.


Saludos y buen finde!