sábado, febrero 28, 2009

Morris Mini Cooper 1275S MK II de Minichamps







John Cooper era un exitoso constructor de vehículos de competición cuya escudería-empresa logró en 1959 un importante hito automovilístico. Cooper usaba unos pequeños monoplazas con pequeños motores traseros de cuatro cilindros Coventry Climax en contradicción a los grandes constructores como Ferrari y Maserati que empleaban bólidos con grandes motores delanteros. Con el aguerrido y rudo piloto australiano 'Black' Jack Brabham los monoplazas de la Cooper Cars lograron los títulos de F-1 de 1959 y 1960 ante la vergüenza de la mismísima Ferrari.

Como ya comentamos en otros posts dedicados al Mini, este simpático e innovador coche no dejó indiferente a nadie y menos aún a un tipo como John Cooper, el cual vio en él potencial para su uso en pistas y rallies. Pero el que nunca vio muy claro que el Mini se convirtiera en un coche deportivo fue su propio padre, el ingenieron Alex Issigonis, ya que para él era un utilitario que venía a satisfacer las necesidades de las clases trabajadoras. No obstante y pese a la supuesta aversión el mismo Issigonis recomienda a Cooper que para presentar su proyecto en la BMC lo haga directamente al mismo administrador delegado de la empresa, George Arriman. La conversación entre los mismos fue todo un éxito y en 1961 John Cooper se pone manos a la obra. Si ya con su mismo nacimiento el Mini básico había supuesto toda una revolución en el mundo del automóvil al revolucionar el concepto de auto utilitario, su versión deportiva, el Cooper se convirtió en el primer utilitario de altas prestaciones de la historia, un tipo de coche muy común hoy en día, pero un concepto que hasta 1961 no se había explotado.

En 1967, en el marco del salón de Earls Court en Londres, se introduce la segunda generación del Mini, tras casi nueve años en el mercado. Básicamente éste se distinguía por varios elementos estéticos, ya que la carrocería y las formas eran practicamente las mismas. Lo más destacable de todo es la nueva calandra, de forma trapezoidal, con 11 lamas horizontales en la versión Austin y 13 en el Morris. Otros importantes cambios estéticos se dan en la trasera, el parabrisas es más ancho, nótese como los montantes traseros son más estrechos que en el MK I y los pilotos son más grandes y rectangulares. Cambia también la larga palanca de cambios anterior por una más corta proveniente de los Cooper.

La versión que en este post nos ocupa es el Cooper 1275S. De cara a su participación en diferentes competiciones, el director de competición de la BMC, Stuart Turner desarrolló un nuevo motor muy mejorado cuya cilindrada base era de 1.071 cc, el cual mediante pequeñas modificaciones podía cambiar de cilindrada litro arriba, litro abajo, dependiendo de la necesidad de homologación. En su versión de calle ofrecía 75 cv, bastantes para lograr una máxima de 160 Km/H. Algunos elementos propios del Cooper 1275S MK II fueron los asientos más mullidos con respaldo reclinable, o un depósito extra de combustible. Cabe resaltar también que el clásico velocímetro central en los Cooper marcaba, como es lógico, más velocidad que en los Minis normales.

Hace unas semanas hablábamos del Mini MK I de Minichamps y hoy lo hacemos del MK II en versión deportiva Cooper S. Minichamps ha usado el mismo molde y cambian los elementos distintivos propios y la trasera. Es precisamente ese factor de la trasera "de quita y pon" el que estropea un poco esta excelente miniatura. Destacan en el exterior los múltiples elementos ornamentales hechos con piezas independientes así como los cromados de alrederdor de las ventanas. También es muy llamativo el interior con la clásica tapicería bicolor propia de los Cooper, además de todos los detalles como el cuadro central de instrumentos, el salpicadero o el guarnecido de las puertas. Esperemos que Minichamps siga deleitando al coleccionista con más variantes y modelos del mítico utilitario británico.

lunes, febrero 23, 2009

Mercedes 190 'Heckflosse' W110 de Minichamps






En 1961, dos años después de que Mercedes sustituyese su modelo 220 Pontón por el W111, tocó el turno de la renovación de los 180-190 de la gama básica. El nuevo modelo recibió la denominación W110. 

La nueva serie de Mercedes iniciada en 1959 cambiaba radicalmente de estilo frente a los sedanes de la generación anterior, mientras éstos eran de líneas muy redondeadas, la nueva carrocería adoptó unas líneas más angulosas y con una trasera que hacía una clara concesión a los coches del otro lado del Atlántico, en la que destacaban dos pequeñas aletas, de ahí el nombre con el que popularmente se conoció a este coche, 'Heckflosse' en Alemania, 'Fintail' en el mercado anglosajón y 'Colas' en España. 

La serie W110 vino a ser la gama básica de berlinas Mercedes. Sus líneas de carrocería eran practicamente las mismas que su hermano mayor, el W111, aunque tenía un tamaño más contenido. Estéticamente era más sencillo debido a que se trataba de un auto de gran difusión. En vez de los faros delanteros de tulipas verticales ovaladas en las que se incluían los intermitentes y los faros, se mantenían los grupos ópticos redondos del 180 anterior y los intermitentes iban sobre las aletas delanteras. 

Tampoco tenía el junquillo cromado que cruzaba los flancos del coche por la mitad. El 190, modelo que nos ocupa, era el más básico de todos y el primero en aparecer. Su capó era más corto ya que la mecánica elegida era de cuatro cilindros en lugar de seis. Cubicaba 1.9 litros y proporcionaba 80 CV gracias a la alimentación por un carburador Sólex. La velocidad máxima que alcanzaba era de 150 Km/H. También estaba disponible la versión 190 D con el motor diésel OM621 de 2.0 litros, automóvil muy apreciado por el gremio del taxi.

En 1965 la gama W110 renueva sus motores. El modelo base de gasolina sería el 200, mientras que el diésel pasaría a llamarse 200 D. Igualmente se ofreció una nueva versión de gasolina con el motor de seis cilindros M180, denominada en este caso 230. La producción del modelo W110 terminó en enero de 1968 con la introducción de su sustituto, los nuevos W114/115.

Ya Minichamps tenía en su catálogo una muy bonita versión del Mercedes 'Colas' W112 y amplía su rico catálogo de Mercedes clásicos con la versión básica de este modelo, el W110 190. El que pueda pensar que Minichamps ha empleado el mismo molde para ambos coches se equivoca, ya que el 190 es un molde nuevo y se nota colocándolos a ambos juntos. Las proporciones son muy correctas y el detallado exterior es el justo que tenía el modelo real. Es quizás el interior bicolor su factor más interesante. Como único reproche que podemos decir es la elección del color, si bien el gris claro sólido era un tono muy típico en este coche, no hace resaltar bien los cromados (no muchos) que trae. Como nota especial diremos que este Mercedes trae una bola para remolques, por lo que si algún coleccionista tiene un remolque de Minichamps y no sabe a qué modelo colocárselo, éste es uno.

sábado, febrero 14, 2009

Borgward Isabella Sedan de Minichamps







Karl Borgward introdujo en 1954 su nuevo modelo para sustituir al Hansa 1500 y su intención fue continuar con este nombre, no obstante, puesto que los prototipos empleados para su desarrollo llevaban el nombre de Isabella, como la esposa de Borgward, de nombre Elizabeth, éste optó por dicha denominación, naciendo así el Borgward Isabella.

Se trataba de un bonito sedán de dos puertas con un innegale estilo inspirado en los coches americanos, que era la corriente de moda en esos momentos. Este automóvil apareció en 1954 y se vendió hasta el año 1961. La fórmula del sedán de dos puertas estuvo muy de moda entre los coches de segmento medio-alto de la Alemania de los años 50, valgan como ejemplos orientativos el Ford Taunus o el Opel Rekord Hubo un proyecto para hacer un Isabella sedán de cuatro puertas, pero finalmente fue desechado. 

El Isabella montó la mecánica de la casa de cuatro cilindros y 1.5 litros con 60 CV de potencia. En 1955 Borgward amplió la gama Isabella con el familiar Combi y el TS Cabriolet, un descapotable que estrenaba una especificación de 75 CV del motor 1.5 litros. 

Resultó ser un coche muy moderno y adelantado a su tiempo incorporando nuevas técnicas de fabricación y tecnologías, como el uso de aleaciones de acero y aluminio o la separación de los subchasis trasero y delantero con topes de goma para mejorar la insonorización. Su caja de cambios era de cuatro velocidades todas sincronizadas. Con un precio inicial de 7.265 marcos era notablemente más caro que sus contendientes de Ford y Opel, aunque más económico que el Mercedes 180.

En 1957, fecha en que Borgward lanzó el atractivo Isabella con carrocería Coupé deportiva de Karmann, ofreció también la opción de que el Sedan y el Combi pudieran equiparse con el motor de 75 CV. En 1961 Karl Borgward se declaró en bancarrota pero la planta de Bremen siguió produciendo el Isabella hasta 1962.

Con este miniatura, Minichamps completa así toda la gama Borgward Isabella que ya les hemos ido mostrando en posts anteriores del blog. Del modelo en sí diremos que al igual que el resto de la gama se trata de una miniatura de muy buena calidad. Sus formas son muy acertadas. Quizás el punto más criticable del exterior sea que algunos elementos que en el coche de verdad eran cromados aquí se han pintado de color metalizado brillante, mientras que otras piezas sí se han resuelto con plástico cromado. Es el interior quizás su punto más atractivo, en el que destacan sobre todo los detalles de la tapicería bicolor o los guarnecidos internos de las puertas. Una miniatura que no se puede dejar pasar si se quiere completar la gama del precioso automóvil alemán.

jueves, febrero 12, 2009

Saab 99 Saloon de Neo Scale Models






Tras varios años de intensa planificación, Saab comenzó a desarrollar un automóvil diferente a los que había estado vendiendo hasta ahora. Recibió el identificativo de Proyecto Gudmund, ya que se empezó a trabajar en él el 2 de abril de 1965, en la festividad sueca conocida como el Día de Gudmund. 

Fue el diseñador de la casa, Sixten Sason, quien se encargó de coordinar los trabajos. La idea básica era crear un coche algo más grande que introdujera a Saab en una parcela del mercado en la que hasta ahora no había penetrado. Los primeros trabajos consistieron en cortar por la mitad un Saab 96 y ensancharlo, trabajo que dio lugar al prototipo conocido como Paddan (seta, hongo), que fue desechado. Finalmente, el 22 de noviembre de 1967 se mostró en Estocolmo el Saab 99. 

Su diseño rompía claramente con las líneas que hasta ahora habían caracterizado a la segunda firma de automóviles sueca, de formas aerodinámicas y claramente inspiradas en la aviación, aunque seguía siendo un coche, al igual que sus anteriores hermanos, con una marcada personalidad, de hecho, fueron las formas que desde entonces caracterizarían a los modelos de Saab. 

En el apartado mecánico, al principio surgieron algunos dilemas. Hasta ahora los Saab habían usado mecánicas de dos tiempos, pero para este coche los ejecutivos de la marca exigieron una de cuatro tiempos, cosa que la marca no se podía permitir desarrollar debido a los altos costes. Por tanto, se recurrió a mecánicas británicas Triumph, concretamente derivadas de las montadas en la berlina Dolomite, que en manos de Saab y convenientemente modificadas perdieron los problemas de fiabilidad que siempre las caracterizaron. 

El 99 se fabricó en la fábrica finlandesa de Valmet tanto en versión de dos como de cuatro puertas. Uno de los aspectos más curiosos del Saab 99 fue que la ranura del contacto estaba ubicada en el piso, entre los asientos y detrás de la palanca de cambio, de hecho, el sistema antirrobo bloqueaba el cambio y no el volante. El 99 tuvo dos versiones de altas prestaciones, el EMS y el Turbo, aunque de ellos no hablaremos aquí. En 1984, tras 16 años en el mercado, fue susituído por los modelos 90 y 900.

Viendo el trabajo que ha hecho Neo con esta miniatura, sólo nos queda decir que el fabricante holandés tiene una muy buena mano para los Saab. Si bien el conjunto entero podríamos afirmar que es perfecto, sí es cierto que el exterior destaca aún más que el interior, ya que el coche real de por sí tenía un interior algo soso. No obstante viene perfectamente moldeado y decorado con las calcas del cuadro de instrumentos o la línea de imitación de madera. El exterior, tal y como se puede ver en las fotos, está ricamente decorado con piezas independientes, fotograbados o calcas, con detalles tan buenos como la cerradura del maletero o las típicas faldillas-guardabarros con el logo de Saab.

martes, febrero 10, 2009

Mercedes 300 S Cabriolet W188 de Minichamps







"El coche de las élites del mundo", ésta es la frase con la que la prensa mundial definió tras su presentación en el Salón de París de 1951 al nuevo Mercedes, a la que se añadió que definía "el estándar de cómo se debían fabricar los vehículos". 

El Mercedes 300 S, tanto la versión cabriolet como el coupé, nació como complemento a la gran berlina 300, también conocida popularmente como 'Adenauer' ya que fue el coche que eligió el canciller alemán, Konrad Adenauer, como su medio de transporte oficial. 

Era un coche de una belleza sublime pero como buen alemán sus líneas no eran fruto de la casualidad, sino de muchos y concienzudos estudios aerodinámicos para lograr la mayor de las eficiencias. 

Se tomó como punto de partida el chasis del 300 berlina, pero se le recortó para pasar de una longitud de 5,2 metros a 4,7, quedando la batalla en 2,9 metros. El motor de seis cilindros y 3.0 litros fue dotado de tres carburadores Sólex y se le aumentó la compresión para ofrecer 150 CV. En su día fue uno de los coches más rápidos de Alemania, alcanzando sin problemas los 176 Km/H pese a su colosal tamaño. 

En 1955 el motor fue dotado de un sistema de inyección Bosch y su potencia subió hasta los 175 CV. En 1957 Mercedes presentó el 300 SL Roadster, versión abierta del mítico Gullwing, hecho que hizo que los clientes de la marca de la estrella que buscaban un auto especial dirigieran la mirada hacia el nuevo deportivo, cuyo estilo era mucho más moderno, en detrimento del 300 S, de estética más clásica. 

Sólo 760 unidades se vendieron entre cabrios y coupés, pero como la historia pone a todo el mundo en su sitio, hoy el 300 S es uno de los Mercedes más cotizados, haciendo a sus afortunados propietarios dueños de un auténtico tesoro sobre ruedas. El 300 S fue el coche de las altas clases de sociedad por lo que era más normal verlo rodando por las carreteras de la Riviera o las grandes avenidas de Beverly Hills.

Pese a que se ha presentado como novedad, cierto es que este Mercedes ya llevaba tiempo en el catálogo de Minichamps como producto especial para los concesionarios de la marca de la estrella como producto promocional, las llamadas 'Dealer Editions'. No obstante, la calidad ya de por sí del molde junto con unos estupendos acabados en la línea más actual de la marca, hacen que el coche sí parezca un modelo de nuevo cuño. La combinación de colores que se ha elegido no podría haber sido más acertada, ya que es una de las más propias para este coche. Si el acabado exterior denota una muy buena calidad, el interior también esta muy logrado, destacando el precioso salpicadero simulando madera. En definitiva, que esperemos que pronto Minichamps nos proporcione el coupé para poder reunir a la pareja